Quizá todavía no lo sabes, pero meditar tiene muchos más beneficios que el relajarnos y encontrar la paz dentro del caos de la vida diaria. ¡Y uno de esos grandes beneficios tiene mucho que ver con nuestro sistema nervioso! Como sabes, en Gema Martorell confiamos en el poder del Mindfulness y de la meditación para “sanar” en muchos aspectos de la vida. Por ello, en este post, queremos hablar sobre la relación entre la meditación y el equilibrio de tu sistema nervioso.

¿Nos acompañas? ¡Empezamos!

¿Qué es la meditación?

Antes de nada -y por si hay alguna duda- , es fundamental saber qué es la meditación, ¿no crees?

MEDITAR es utilizar una serie de prácticas y procesos psicológicos o mentales que nos permiten reducir los niveles de estrés y modificar nuestras emociones y pensamientos. Meditar es, además, pararnos a reflexionar sobre cómo nos sentimos y sobre por qué nos sentimos así, con la finalidad de eliminar de la mente todo aquello que no nos hace bien.

Para practicar la meditación suele ser importante ubicarnos en un lugar en silencio, sin demasiado luz, adoptar una postura cómoda y cerrar los ojos. A partir de ese momento, comenzará la autoescucha de nuestro cuerpo.

Beneficios en el sistema nervioso

Que la meditación es beneficiosa para nuestro sistema nervioso es algo que se han ocupado de demostrar numerosos estudios científicos. Tanto es así que existen evidencias sobre cómo la meditación favorece el control emocional. Y no, no hablamos de energías místicas ni de poderes sobrenaturales. Pese a lo que algunas personas creen firmemente, la meditación no está -o no debería- ligada a ninguna creencia ni práctica religiosa.

Una de las formas más evidentes de ver cómo ayuda la meditación al sistema nervioso es a través del estrés. Muchas de las enfermedades o patologías psicosomáticas encuentran su origen en el estrés. Por tanto, si la meditación ayuda a calmar el estrés, estará ayudando a aliviar los síntomas de este tipo de enfermedades.

Asimismo, la meditación incrementa la capacidad de flexibilidad cognitiva de quienes la practican. Es decir, la capacidad que tiene una persona de decidir y pensar acerca de dos conceptos al mismo tiempo.

El sistema nervioso autónomo, el protagonista

Para entender los beneficios de la meditación en nuestro sistema nervioso, has de saber que estos suelen darse en el sistema nervioso autónomo. Es decir, aquel que está formado por el sistema nervioso simpático (que alerta al cuerpo de posibles peligros) y el sistema nervioso parasimpático (que contrarresta las acciones del sistema anterior).

A través de la respiración y de pensamientos positivos y de calma, lograremos que tu sistema nervioso encuentre esa calma que necesita. ¡Encontrarás el equilibrio en tu sistema nervioso!

Seguro que alguna vez has escuchado el término Mindfulness. Algunos lo relacionan con el yoga, otros con la meditación, lo espiritual o el conocerte por dentro. En este post, me he propuesto acercarte un poquito más al Mindfulness, una disciplina que utilizo con mis pacientes y que tiene múltiples beneficios. Si quieres aprender a vivir conscientemente tu vida, te invito a que te quedes. ¡Descubre este pequeño acercamiento al Mindfulness!

Como te imaginarás, Mindfulness es una palabra anglosajona. Su traducción más literal es “consciencia” o “atención plena”. Sin embargo, si profundizamos más, nos encontramos con que este arte es la perfecta unión entre muchos más términos como atención, recuerdo, plena consciencia… En definitiva, se trata de aprender a disfrutar de este momento, el que estás viviendo ahora. quizá podríamos relacionarlo con el mítico Carpe Diem…

Los maestros del Mindfulness aseguran que, si nos dejáramos llevar por nuestra mente, siempre viviríamos en un constante viaje entre el presente y el pasado. Es decir, nos dejaríamos atormentar por cosas que ya pasaron, capítulos que hemos decidido olvidar o incluso que ya hemos superado. La razón es que la mente es volátil, que a veces está aquí, pero de inmediato se planta en el pasado. Por eso, el Mindfulness es la herramienta perfecta para estar aquí y ahora, siendo completamente conscientes de quiénes somos y qué queremos en este momento.

Cómo puede ayudarte el Mindfulness

Los beneficios del Mindfulness son casi innumerables. De hecho, no quiero centrarme tanto en ellos en este post como en los grandes logros que podrás conseguir si lo aplicas a tu vida. Esta disciplina ayuda a conseguir pequeñas metas, pero como verás a continuación, también te permitirá alcanzar grandes objetivos. ¿Quieres saber cómo puede ayudarte el Mindfulness?

• Ofrece las herramientas para empezar a disfrutar del momento que estás viviendo.
• Permite establecer una relación estrecha entre tu cuerpo, tu mente y tus sentimientos.
• Te enseña a gestionar tus emociones para que no controlen tu día a día.
• Te permite observarte como un espectador para darte cuenta de tus comportamientos y sentimientos.
• Ayuda al control del estrés y la ansiedad, ya que permite disminuir los niveles de cortisol.

Como has podido comprobar, el Mindfulness te ayudará a ser más consciente de lo que verdaderamente sientes; a no dejarte que influya demasiado en tu vida; a conocerte mejor; y a vivir conscientemente, entre otras muchas cosas.

El Mindfulness y los patrones mentales

Los patrones mentales son comportamientos o rutinas que nosotros mismos nos vamos creando con el paso de los años y que nos sirven para tener una vida organizada y pautada. Son fabricados por nuestro sistema de percepción de la información y están presentes en todos nuestros días.

Existen distintos tipos de patrones mentales: unos que nos ayudan en nuestras rutinas básicas y que hemos fabricado de manera consciente, y otros que poseemos de manera inconsciente y que nos afectan en un plano más psicológico. Por ejemplo, un patrón mental puede ser la necesidad de hacer ejercicio físico todos los días, pero también los pensamientos autodestructivos o negativos, el sentirnos pequeñitos al lado de otras personas o la necesidad de quejarnos por todo.

Como has podido leer, existen los patrones mentales negativos. No te ayuda en nada ser una persona negativa, ni andar quejándote de todo lo que te ocurre. ¡Y, en esto, también puede ayudarte el Mindfulness! Se ha demostrado que algunas técnicas de Mindfulness pueden a ayudarte a cambiar algunos de tus patrones de pensamiento que no te hacen bien. ¡Te damos unas pistas de cómo hacerlo!

• Identifica aquello que quieres cambiar. Para ello, será esencial establecer esa conexión mente-cuerpo-emociones de la que te hemos hablado antes.
• Busca nuevos patrones más positivos. Te damos un ejemplo: si posees patrones mentales que te incitan a comer impulsivamente o de manera incorrecta, será conveniente introducir patrones relacionados con el amor por uno mismo, el cuidado de nuestro cuerpo y mente, etc.
• Crea rutinas con los nuevos patrones. Es esencial que seas muy consciente de todas tus rutinas y que introduzcas los nuevos patrones de comportamiento en ellas. Para ello, el Mindfulness es esencial.

Tal y como te he comentado al comienzo de este post, yo trabajo con mis pacientes de nutrición y dietética desde el Mindfulness. Es fundamental que, para encontrarte a gusto con tu cuerpo, trabajemos muchos más aspectos que tus desayunos, comidas y cenas. Es esencial que te conozcas, que te quieras, que te escuches y que tu relación con la comida sea idílica. ¡Conóceme y descubre por qué te estoy esperando! ¿Te animas a dar a tu vida un giro de 180 grados!